21
El Becerro de Oro
16 noviembre
Exodus 32:1-35
Poco después de que Dios estableciera su pacto con Israel, ellos lo rompieron al mezclar su adoración a Yahvé con la creación y adoración de un ídolo. En respuesta, Dios se dispuso a destruir Israel y comenzar un nuevo pacto con Moisés. Pero Moisés apeló al carácter de Dios e intercedió por Israel. Dios respondió con una misericordia increíble.
20
Apartados para el Servicio
9 noviembre
Exodus 28:1-31:17
En estos capítulos, Dios describe las instrucciones para las vestimentas sacerdotales, los muebles, los sacrificios y más, todos los cuales sirven como poderosos símbolos para representar cómo el pueblo de Dios es apartado para estar en comunión con él. Estos símbolos tangibles palidecen como copias reflejadas del sacrificio perfecto y del sacerdote intercesor que ahora tenemos en Jesucristo.
19
Habitar Entre Ellos
2 noviembre
Exodus 25:1-27:21
En estos capítulos, Dios da instrucciones detalladas a Moisés para construir el Tabernáculo, el lugar donde Él habitará entre su pueblo. Se describen los muebles sagrados —el arca del pacto, la mesa de los panes de la proposición, el candelabro y el altar de los sacrificios— y las estructuras del lugar santo y el atrio. Cada detalle, desde los materiales hasta las dimensiones, refleja la santidad de Dios y la importancia de su presencia en medio de Israel. Estos capítulos nos recuerdan que la adoración no depende de nosotros, sino de acercarnos a Dios con obediencia y reverencia, y que Él desea morar en medio de su pueblo cuando nos acercamos con corazones entregados.
18
La Comida de Hermandad
26 octubre
Exodus 24:1-18
Mediante el derramamiento de sangre animal, Moisés y los ancianos pueden tener comunión con Yahvé en paz, lo cual es un presagio de Cristo, quien derramó su propia sangre como ofrenda de paz para restaurar nuestra comunión con Dios. El largo tiempo que Moisés pasó con Dios en el monte Sinaí nos recuerda que esperar pacientemente a Dios es una experiencia normal para su pueblo.
17
Una Comunidad Justa
19 octubre
Exodus 20:22–23:33
En estos capítulos, Dios aplica los diez mandamientos a la vida cotidiana de los israelitas, estableciendo principios rectores por los que deben regirse para ser una nación apartada que represente tanto su amor como su justicia ante el mundo. Hoy, Dios llama a su pueblo, la Iglesia, a ser esa comunidad santa.
16
Palabra Divina
12 octubre
Exodus 20:1–21
Dios continúa dándose a conocer a su pueblo y prepara una relación personal con ellos al darles su Palabra divina. Nuestra lealtad absoluta a Dios requiere que pongamos nuestra esperanza y confianza en Jesús, en quien finalmente se cumple la Palabra del Señor.
15
La Montaña de Dios
En el Sinaí, vemos dos características paradójicas de Dios: su trascendencia como un poder santo y aterrador cuya mera presencia destruirá a quienes se acerquen demasiado; y su inmanencia como un Dios relacional que desciende para acercarse a su pueblo. La escena presagia a Jesús, la plenitud de Yahvé envuelta en carne: Emanuel, Dios con nosotros.
14
Una Lección de Liderazgo
28 septiembre
Exodus 18:1-27
En este pasaje, Moisés recibe consejo de una fuente inesperada: su suegro, Jetro, un sacerdote pagano de Madián. En lugar de rechazar el consejo de Jetro, Moisés se humilla y lo acepta. De manera similar, estamos llamados a aceptar nuestras limitaciones y recibir la guía de Dios a través de otros para que podamos servirnos unos a otros con fortaleza.
13
Agua de la Roca
21 septiembre
Exodus 17:1-16
Mientras los israelitas viajan por el desierto, enfrentan pruebas de sed y la hostilidad de los amalecitas. En lugar de dejarse probar por Dios, asumen una postura de autoridad en sus propios términos. Pero Dios responde a su prueba con paciencia y gracia: Él es la roca de vida y salvación.
12
Pan del Cielo
14 septiembre
Exodus 15:22-16:36
Cuando los israelitas salen de Egipto, no solo entran en el desierto, sino también en un tiempo de pruebas. Su nueva libertad les trae desafíos que ponen de manifiesto su falta de confianza en el Dios de su liberación. Pero Dios sigue proveyendo a su pueblo mediante el maná del cielo, un presagio de Jesús, nuestro pan de vida.
11
El Mar Rojo
7 septiembre
Exodus 13:17–15:21
En una de las historias de salvación más importantes del Antiguo Testamento, Dios guía a los israelitas fuera de Egipto mediante otra demostración de su poder: la separación del Mar Rojo. Es un recordatorio, tanto para los israelitas como para nosotros, de que Dios es digno de confianza y fiel para rescatar a su pueblo, incluso cuando el camino parece imposible.
10
La Salida de Egipto
31 agosto
Exodus 12:34–13:16
Cuando los israelitas comienzan su éxodo fuera de Egipto, Yahvé establece algunas de las condiciones de su relación con él. Instituye la fiesta de la Pascua, una conmemoración anual de su liberación. La consagración de los primogénitos de Israel les recuerda que pertenecen a Dios, al tiempo que presagia la obra redentora de Cristo.
9
La Pascua
24 agosto
Exodus 11–12:33
Durante la primera Pascua, Dios dio instrucciones específicas a su pueblo que, si se obedecían, los protegerían de la última plaga sobre Egipto: la muerte de todos los primogénitos. La sangre de un cordero sin mancha haría que el Destructor pasara por alto las casas que estuvieran marcadas, apenas como la sangre de Jesús protege al pueblo de Dios de su juicio contra nuestro pecado.
8
La Escalada del Juicio
17 agosto
Exodus 9:13–10:29
Mientras Dios continúa enviando plagas contra Egipto, el faraón reconoce el poder de Yahvé. Pero su remordimiento pronto se revela como un arrepentimiento falso: un deseo de alivio seguido de un pecado continuo. Si queremos ser personas que difunden la fama de Dios, debemos negarnos a nosotros mismos y arrepentirnos verdaderamente, obedeciendo la voluntad de Dios y buscando la santidad.
7
Poder sobre los dioses
10 agosto
Exodus 7:14–9:12
En estos capítulos, Moisés se presenta repetidamente ante el faraón para exigirle la liberación de los israelitas. El faraón se niega, y las plagas que siguen revelan que el faraón no se enfrenta a Moisés, sino a Yahvé. A través de ciclos de sufrimiento y alivio, el corazón del faraón se endurece, revelando su compromiso de rechazar la luz de Dios en favor de la oscuridad.
6
Redoblar la Marcha
3 agosto
Exodus 6:14–7:13
En este pasaje, Dios utiliza la genealogía de Moisés para establecer su legitimidad como líder de Israel y mensajero de Dios ante el faraón. Aunque Dios trata a Moisés con bondad a pesar de su debilidad e insuficiencia, le ordena que se presente ante el faraón, y Moisés obedece porque es receptivo a Dios.
5
Obediencia y Oposición
Cuando Moisés obedece a Dios y enfrenta al faraón, espera que Dios comience de inmediato a rescatar a Israel. Pero en lugar de mejorar, todo empeora, tanto para los israelitas como para Moisés. De la misma manera, a veces nuestras vidas se vuelven más difíciles cuando seguimos a Dios, pero Él sigue siendo fiel y está obrando. Usa nuestro sufrimiento para acercarnos a Él.
4
Una Respuesta Temerosa
En Éxodo 4, Moisés se presenta como un hombre débil, temeroso y pecador, y Dios lo utiliza de todos modos. Dios responde a las inseguridades de Moisés con paciencia, desviando su atención de sí mismo hacia Yahvé; pero Dios también trata con severidad la desobediencia de Moisés. Como pueblo de Dios, también nosotros debemos seguir su llamada a ser distintos con fe, valentía y reverencia.
3
Dios Se Revela
En medio de la oscuridad y el fracaso de Moisés, Dios se le aparece en el monte Sinaí. Dios se hace accesible a Moisés, lo consuela y le asegura su identidad en el pacto; pero Dios también revela su santidad, declarando su nombre -Yahvé, «Yo soy el que soy»- y encargando a Moisés que saque a los israelitas de la esclavitud.
2
Fuera del Agua
En Éxodo 2, conocemos a Moisés, un hombre cuyo providencial nacimiento, educación, trasfondo cultural y elecciones lo sitúan como parte integrante del plan de rescate que Dios está llevando a cabo para su pueblo.
1
Un Pueblo Sufrido
El libro del Éxodo es una historia de redención y castigo, de salvación y juicio. Aunque la nación de Israel está esclavizada y oprimida bajo un cruel poder mundano, Dios la bendice y la rescata y la llama a ser su pueblo distinto.