DÍA 3: Dependencia de Dios

DÍA 3: Dependencia de Dios

Lectura

Cada vez él me dijo: «Mi gracia es todo lo que necesitas; mi poder actúa mejor en la debilidad». Así que ahora me alegra jactarme de mis debilidades, para que el poder de Cristo pueda actuar a través de mí. Es por esto que me deleito en mis debilidades, y en los insultos, en privaciones, persecuciones y dificultades que sufro por Cristo. Pues, cuando soy débil, entonces soy fuerte.

2 Corintios 12:9-10

En este pasaje, el apóstol Pablo comparte cómo Dios le respondió cuando pidió ser librado de un "aguijón en la carne". En lugar de quitarle la dificultad, Dios le enseñó una verdad profunda: Su gracia es suficiente y Su poder se perfecciona en la debilidad. Esto significa que cuando reconocemos nuestras limitaciones, dejamos espacio para que el poder de Dios obre en nosotros.

Versículo Clave

Cada vez él me dijo: «Mi gracia es todo lo que necesitas; mi poder actúa mejor en la debilidad». Así que ahora me alegra jactarme de mis debilidades, para que el poder de Cristo pueda actuar a través de mí.

2 Corintios 12:9

Reflexiona

Las dificultades de la vida nos recuerdan que no somos autosuficientes. A menudo, tratamos de luchar con nuestras propias fuerzas hasta que nos damos cuenta de que no podemos más. Pero es precisamente en esos momentos cuando Dios nos invita a descansar en Su gracia.

¿Hay áreas en tu vida donde sientes que eres demasiado débil o incapaz? Tal vez enfrentas una lucha interna, una enfermedad, un desafío financiero o una relación difícil. En lugar de ver esas áreas como obstáculos, considera que pueden ser oportunidades para ver el poder de Dios en acción.

Dios no te pide que seas fuerte por tu cuenta, sino que reconozcas tu necesidad de Él. ¿Estás dispuesto a dejar de depender de tus propias fuerzas y confiar en Su gracia?

Oración

Señor, gracias porque Tu gracia es suficiente para mi vida. En mis momentos de debilidad, ayúdame a no desesperar, sino a confiar plenamente en Ti. Enséñame a ver mis limitaciones como una oportunidad para que Tu poder se manifieste. No quiero depender de mis propias fuerzas, sino de Ti en todo momento. En el nombre de Jesús, amén.