DÍA 3: La Distinción de Dios

DÍA 3: La Distinción de Dios

Lectura

Antiguo Testamento: Éxodo 8:16-24

En Éxodo 8, Dios envía una plaga de insectos sobre todo Egipto, pero hace algo sorprendente: protege a Su pueblo en la región de Gosén, donde ninguna mosca entra. Esto no solo muestra Su poder, sino también Su cuidado especial hacia quienes le pertenecen.


Nuevo Testamento:
1 Pedro 2:9-10

En 1 Pedro 2, se nos recuerda que hemos sido escogidos, apartados y llamados para proclamar las virtudes de Aquel que nos sacó de la oscuridad a Su luz admirable. Esta identidad nos coloca bajo el amparo divino, pero también nos da una responsabilidad: vivir de manera que refleje quién es nuestro Dios.

Versículo Clave

Pero esta vez haré una excepción con la región de Gosén, donde vive mi pueblo. Allí no habrá moscas. Entonces sabrás que yo soy el Señor, y que estoy presente incluso en el corazón de tu tierra.

Éxodo 8:22

Reflexiona

Una de las verdades más alentadoras de la Biblia es que Dios sabe quiénes son suyos y cuida de ellos (2 Timoteo 2:19). La distinción que hizo entre Egipto y Gosén no fue casualidad: fue una señal visible de que Él protege y preserva a Su pueblo, incluso en medio del juicio.

Pero esta protección no es solo un privilegio… es también un llamado. Ser parte del pueblo de Dios significa vivir de forma distinta, reflejando Su carácter en nuestras palabras, decisiones y actitudes. No fuimos escogidos para aislarnos, sino para ser luz en medio de un mundo oscuro.

A veces, como cristianos, nos enfrentamos a “plagas” modernas: caos social, incertidumbre económica, problemas familiares. Sin embargo, así como en Gosén no entró ninguna mosca, Dios sigue siendo capaz de darnos paz en medio del caos y fortaleza en medio de la adversidad.

Y hay algo más: ser pueblo escogido implica que nuestras vidas deben ser un testimonio vivo. No basta con experimentar la protección de Dios; debemos proclamar Su bondad, Su gracia y Su verdad a quienes aún viven bajo la opresión del “Egipto” espiritual.

Preguntas de Aplicación:

-¿En qué áreas de tu vida necesitas recordar que Dios te distingue y protege como parte de Su pueblo?

-¿Cómo puedes mostrar, con acciones concretas, que tu identidad está en Cristo y no en este mundo?

-¿A quién podrías proclamar hoy las virtudes de Dios, usando tu testimonio personal como ejemplo?

Oración

Señor, gracias porque me has llamado de la oscuridad a tu luz admirable. Gracias porque, así como cuidaste a tu pueblo en Gosén, cuidas de mí en medio de las pruebas. Ayúdame a vivir con la certeza de que soy parte de tu pueblo escogido, y que mi vida proclame siempre tu amor, tu justicia y tu fidelidad. Amén.