DÍA 1: Dios usa lo que está en tus manos

DÍA 1: Dios usa lo que está en tus manos

Lectura

Antiguo Testamento: Éxodo 4:1–5

Dios llama a Moisés, quien responde con inseguridad: “¿Y si no me creen?”. Entonces Dios le pide que mire lo que tiene en la mano “una simple vara” y la transforma en una serpiente. Moisés aprende que lo que parece insignificante puede ser poderoso cuando está en las manos de Dios.

Nuevo Testamento: 1 Corintios 1:26–29

En 1 Corintios, Pablo recuerda a los creyentes que Dios elige lo débil del mundo para avergonzar lo fuerte, demostrando que el poder de Dios se perfecciona en nuestra debilidad.

Versículo Clave

Entonces el Señor le preguntó:

—¿Qué es lo que tienes en la mano?

—Una vara de pastor—contestó Moisés.

Éxodo 4:2

Reflexiona

¿Cuántas veces sentimos que lo que somos o tenemos no es suficiente para lo que Dios nos está pidiendo? Moisés, al igual que muchos de nosotros, miró su limitación antes de mirar a Dios. Pero el Señor no le pidió lo que no tenía. Le pidió lo que ya estaba en su mano.

Dios no necesita herramientas extraordinarias, necesita obediencia. Y cuando le entregamos incluso lo ordinario, Él lo convierte en algo milagroso. ¿Estás dispuesto a soltar lo que tienes “tu tiempo, tu historia, tus habilidades, tus recursos” para que Dios lo use?

Tal vez pienses que tu testimonio no es impactante, que tu talento es pequeño, que tu tiempo es poco. Pero en las manos del Dios eterno, incluso una vara seca puede abrir mares. Dios te pregunta hoy, como a Moisés: “¿Qué tienes en tu mano?”. No ignores esa pregunta. Es el inicio de tu llamado.

Preguntas de Aplicación:

-¿Qué talentos, experiencias o recursos has subestimado en tu vida?

-¿Qué te impide entregar lo que tienes en tus manos para que Dios lo use?

-¿Cómo podrías hoy usar algo simple para bendecir a otros o responder al llamado de Dios?

Oración:

Señor, perdóname por enfocarme en lo que no tengo. Abre mis ojos para reconocer lo que tú ya pusiste en mis manos. Ayúdame a confiar en que, aunque parezca poco, en tus manos puede ser instrumento de transformación. Úsame como tú quieras. Amén.