DÍA 2: El valor de un rincón sagrado: Tu tienda del encuentro

Lectura

Antiguo Testamento: Éxodo 33:7–11

Moisés pone una tienda fuera del campamento para hablar “cara a cara” con Dios. Cada vez que entraba, la gloria del Señor descendía, y toda la comunidad tenía reverencia al ver ese encuentro íntimo.

Nuevo Testamento: Marcos 1:35

Jesús nos modela la importancia de buscar lugares tranquilos y apartados para orar y renovar fuerzas con el Padre.

Versículo Clave

Dentro de la carpa de reunión, el Señor hablaba con Moisés cara a cara, como cuando alguien habla con un amigo. Después, Moisés regresaba al campamento, mientras que su asistente, el joven Josué, hijo de Nun, permanecía en la carpa de reunión.

Éxodo 33:11

Reflexiona

Tener un “lugar de encuentro” es esencial para cualquier creyente que quiera una experiencia real y cotidiana con Dios. No se trata de un espacio físico glorioso, sino de una decisión diaria: apartar tiempo y espacio aunque sea sencillo, para buscar al Señor como el mejor de los amigos. Moisés muestra que la intimidad forja liderazgo, da claridad y transforma el entorno: después de hablar con Dios, tenía fuerzas para guiar y decisiones para tomar.

A veces, vivimos de oración rápida o de “sólo cuando hay crisis”. El reto de Éxodo 33 es construir una tienda diaria: puede ser tu sala, tu auto, tu escritorio antes del bullicio, un paseo en el parque o el silencio temprano. Hazlo tu lugar especial; cuídalo. Quien aprende a conversar honestamente con el Padre en lo privado, verá la diferencia en todo lo demás.

Preguntas de reflexión

-¿Dónde y cómo suelo buscar ese “cara a cara” con Dios? ¿Es rutina o encuentro real?

-¿Cómo puedo proteger y enriquecer mi tienda de encuentro diario con el Señor?

-¿Quién ve cambios en mí porque me encuentro con Dios de verdad?

Oración

Padre, ayúdame a encontrar y cuidar mi lugar de encuentro contigo. Enséñame a disfrutar de tu amistad y dejar que esa relación renueve todo en mi vida. Amén.