DÍA 3: Un Dios que se involucra: Su presencia en mis labores

Lectura

Antiguo Testamento: Éxodo 30:17–38; 31:1–11

Dios instruye sobre el lavamanos, el aceite y el incienso, y llena a Bezaleel y Aholiab con sabiduría para las obras de arte y arquitectura del Tabernáculo. Nuestra labor es digna cuando la hacemos en respuesta y dependencia de Su presencia.

Nuevo Testamento: Efesios 2:10

Somos hechura de Dios, creados en Cristo para buenas obras; Dios prepara cosas concretas para que dejemos Su huella en la vida con excelencia y propósito.

Versículo Clave

»Ordénale al pueblo de Israel que te traiga aceite puro de olivas prensadas para la iluminación, a fin de mantener las lámparas siempre encendidas.

Éxodo 31:3

Reflexiona

A veces separamos lo “espiritual” de lo laboral, artesanal o creativo. En el Tabernáculo, Dios llena a los obreros de inspiración divina para su trabajo diario. Todo esfuerzo, desde limpiar, construir, programar, enseñar o cocinar, puede ser tocado y dirigido por Dios para bendición. ¿Pedimos sabiduría para cada proyecto, grande o pequeño? ¿Reconocemos a Dios como fuente de creatividad y excelencia en lo que hacemos?

En el día a día, invitar a Dios a nuestros encargos no solo dignifica la tarea, sino que la hace más efectiva y mucho más significativa. Todo lo que hacemos puede ser acto de adoración si lo hacemos en Su presencia y para el bien de otros.

Preguntas de reflexión

-¿Cuál es mi actitud diaria ante el trabajo, lo artesanal o el servicio? ¿Lo hago a la ligera o con sentido espiritual?

-¿Para qué tarea necesito pedir sabiduría y creatividad de Dios esta semana?

-¿Cómo puedo ayudar a otros a reconocer la presencia y propósito de Dios en su trabajo cotidiano?

Oración

Espíritu Santo, lléname de tu sabiduría y creatividad hoy. Que cada labor y proyecto sea reflejo de tu presencia y excelencia en mi vida. Amén.