Boletín Mujeres en Gracia | Diciembre: La Postura de Nuestro Corazón 2025
Desde donde estés leyendo este boletín quiero que pienses en tu postura. ¿Hay tensión en alguna parte de tu cuerpo? ¿Estás sentada, acostada, de pie? ¿Cómo está tu cuello, tu espalda? ¿Te duele algo? Quiero que cierres los ojos y respires profundo tres veces. Yo lo estoy haciendo mientras escribo, mientras le pido a Dios que me ayude a soltar la tensión en mi cuello y en mis cansados pies.
La postura importa, y es algo en lo que yo quiero mejorar. A veces, cuando estoy caminando y me veo en un espejo pienso: “Uy no, qué jorobada. ¡Hombros atrás, espalda recta!” Pero aunque podemos trabajar en nuestra postura física, la postura de nuestro corazón tiene mayor importancia. En esta temporada donde podemos dejarnos llevar por el ajetreo y el autoenfoque, te invito a tomar un tiempo para preguntarte: ¿cómo está la postura de tu corazón?
La postura de nuestro corazón puede describirse de muchas maneras. ¿Estamos rendidas a Cristo, confiadas y humildes? ¿O estamos endurecidas, orgullosas o distraídas? ¿Tenemos un corazón agradecido, enseñable y sensible a la voz de nuestro Padre, o es quejumbroso, apático o temeroso?
Yo puedo ver en mi propio corazón momentos de impaciencia, falta de agradecimiento y crítica. A veces mi corazón se inclina más hacia el temor que hacia la confianza, más hacia el cansancio que hacia la adoración. Pero me reconforta saber que Dios nos llama siempre a volver a Él, a rendir de nuevo nuestro corazón y a dejar que su Espíritu nos transforme.
En esta temporada quiero invitarte a tener una postura expectante, con el corazón inclinado hacia el verdadero significado de la Navidad: Cristo mismo. Que cada luz, cada canción y cada momento de preparación sean recordatorios de Aquel que vino a habitar entre nosotros. Que no solo celebremos Su nacimiento como un evento histórico, sino como una verdad viva que transforma nuestro presente. Que nuestro corazón se mantenga despierto, sensible y lleno de esperanza al recordar que Jesús vino, que vive en nosotros, y que un día regresará para hacer nuevas todas las cosas.
Y mientras esperamos y celebramos, te invito a unirte en oración intencional durante este tiempo de Adviento. Hemos preparado un calendario enfocado en orar por las personas a nuestro alrededor: familia, vecinos, amigos, entre otros que quizás aún no conocen a Cristo. Que cada día sea una oportunidad para orar por otros y pedirle a Dios que podamos compartir esta esperanza con los demás. Que esta Navidad nos encuentre con un corazón rendido, confiado y dispuesto a amar como Él nos amó. Como dice Isaías 25:8–9: “¡Él devorará a la muerte para siempre!...¡Este es nuestro Dios! ¡Confiamos en él, y él nos salvó! Este es el Señor en quien confiamos. ¡Alegrémonos en la salvación que nos trae!”
Les deseo una muy Feliz Navidad,
Nathalie Richard
Leer:
- Este mes, toma un tiempo para leer la historia de la Navidad que encontramos en Mateo 1:18-2:12
Todo eso sucedió para que se cumpliera el mensaje del Señor a través de su profeta: «¡Miren! ¡La virgen concebirá un niño! Dará a luz un hijo, y lo llamarán Emanuel, que significa “Dios está con nosotros”».
2. Usando el calendario de Adviento, lee los versículos de los sábados para meditar en las verdades bíblicas sobre quién es Dios.
Preguntas Para Reflexionar:
- ¿Cómo describirías la postura de tu corazón en este momento? ¿Qué puedes hacer hoy para alinear tu corazón con la Palabra de Dios?
- ¿De qué manera puedo mantener mi corazón expectante y enfocado en Cristo durante esta temporada, más allá del ajetreo y las actividades?
- Usando el calendario de Adviento, ¿puedes orar por las respectivas categorías cada día? ¿Cómo puedo compartir la esperanza y el amor de Cristo con las personas por las que estoy orando?
Puedes ver e imprimir el calendario de Adviento aquí.